En entrevista con Sputnik Nóvosti, el coordinador mundial de la campaña por el Tratado Snowden y colaborador del periodista norteamericano Glenn Greenwald en la difusión de los documentos de la Agencia Nacional de Seguridad Nortamericana (NSA), David Miranda, confirmó que un borrador del tratado internacional ya estaría circulando entre las misiones diplomáticas presentes en Nueva York, incluida la del Vaticano.
"Hemos mantenido diversas reuniones para que los embajadores y expertos en derecho internacional evalúen nuestra propuesta, de momento esperamos una respuesta del papa Francisco y de varios países aunque no estoy autorizado a señalar cuáles porque podría influir a la hora de sumarse a nuestra campaña", explicó el brasileño quien ya impulsó anteriormente el "Tratado Snowden" para facilitar asilo al exagente de la NSA en varios países.
"El modelo que proponemos para el tratado internacional contra el espionaje debe ser bien analizado puesto que el concepto de privacidad de un país europeo no es el mismo que de un asiático o árabe", recordó Miranda quien citó al comisario en Derecho a la Privacidad de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (OACDH) de la ONU, Joseph Cannataci, como principal asesor del borrador.
"El caso de Edward Snowden reveló al mundo la necesidad de crear una legislación internacional firme para protegernos contra el espionaje de nuestros gobiernos o de terceros países", alertó el brasileño quien sufrió en sus propias carnes la presión de los gobiernos afectados por las revelaciones de Snowden al ser detenido y retenido en el aeropuerto de Heathrow bajo el amparo jurídico de la "Terrorism Act 2000" en 2013.
Tema: Espionaje cibernético de EEUU
Por último, el activista adelantó que la la campaña en la plataforma AVAAZ a favor de un tratado internacional contra el espionaje cibernético con el apoyo expreso de Edward Snowden ya ha conseguido más de 41 millones de firmas a favor en todo el mundo, por lo que "existe en el mundo una conciencia global de que debemos proteger nuestro derecho a la intimidad en un mundo cada vez más interconectado".