"El Señor Tsipras no pidió ninguna ayuda nuestra, y es obvio, (…) las decisiones deben ser fundamentales y no se trata solo de dinero", dijo Putin en la conclusión de las cumbres de BRICS y la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS).
El mandatario ruso expresó la esperanza de que la crisis griega se resuelva próximamente y acusó a la Comisión Europea de inacción cuando tenía tantas quejas sobre la economía griega.
"Se puede acusar a los griegos de todo, pero ¿donde estaba la Comisión Europea si hubo irregularidades? ¿Por qué no corrigieron las actividades económicas de los anteriores gobiernos de Grecia, por qué entregaban tales bonos y préstamos, por qué permitían mantener impuestos tan bajos en algunos sectores de economía?", preguntó.
Además, Putin subrayó que la cuestión de estancia en la zona euro es "elección soberana de las autoridades y el pueblo griego".
El país heleno mantiene desde hace meses negociaciones con la troika de acreedores –el Banco Central Europeo, el Fondo Monetario Internacional y la Comisión Europea (CE)– para reestructurar la deuda, que para marzo de 2015 se estimó en casi 313.000 millones de euros, según el Ministerio de Finanzas griego.
El pasado domingo se celebró en Grecia un referéndum en el que el 61% de los griegos apoyaron el "no" a la severa austeridad que proponían los acreedores a cambio de financiación.