A su juicio, la resolución del conflicto en Siria es una condición sine qua non de la lucha contra el EI, junto con el apoyo de los países de la coalición a las Fuerzas Armadas de Irak.
Fabius señaló al mismo tiempo que "será una lucha larga", agregando que París y otros participantes de la coalición han de convencer a Rusia de la necesidad de cambiar el régimen de Asad para hacer frente al EI con eficacia.
"Necesitamos dialogar con los rusos, ellos pueden jugar un importante papel (en este asunto) y no deben estar interesados en que en Siria se imponga el caos", dijo.
La organización yihadista, que cuenta con unos 30.000 miembros según la CIA, ha proclamado un califato en las áreas bajo su control y pretende ampliar su zona de influencia con células que actúan en Libia, Yemen y otras naciones de Oriente Medio y África del Norte.
De momento no existe un frente único de lucha contra el EI: por un lado hay una coalición internacional con EEUU a la cabeza, que se limita a bombardear desde el aire las posiciones del grupo, y por el otro, las tropas gubernamentales de Siria e Irak y los kurdos de estos dos países.
Las hostilidades han dejado miles de civiles muertos, centenares de miles de refugiados y otros miles de rehenes en manos de los islamistas radicales.