"Hoy, al igual que después de la Segunda Guerra Mundial, ha llegado el momento en el que hay que hacer una elección decisiva entre la cooperación y la confrontación", dijo el canciller ruso en la Conferencia de Seguridad que transcurre en Moscú.
Rusia en estos asuntos ha adoptado un enfoque prudente, subrayó.
"Estamos lejos de tensar los ánimos alarmistas pero llamamos a no infravalorar las perspectivas de un peligroso deterioro de la situación internacional", indicó el jefe de la diplomacia rusa.
"El conflicto en Ucrania no tiene solución militar y no hay una alternativa sensata al arreglo pacífico de la crisis interna ucraniana en base a un pleno e incondicional cumplimiento de los acuerdos de Minsk", señaló.
Al mismo tiempo, el canciller ruso se sorprendió por el apoyo de Washington a la coalición que lucha contra los hutíes en Yemen.
"Genera preguntas una situación en la que EEUU contempla con benevolencia y alienta directamente la operación militar de la coalición que busca restaurar en el poder a un presidente prófugo, mientras que en Ucrania Washington hizo todo lo contrario, apoyando y ayudando a organizar un golpe de Estado", subrayó.