"Ellos mismos deben ocuparse de la recuperación (…) hacer todo lo posible para que el país se preserve", dijo en una entrevista al periódico tailandés Nation y agregó que Moscú "apoyará este proceso, pero sin intervenir".
Mencionó que Rusia no puede permanecer indiferente cuando la gente en Ucrania sufre hambre, no recibe los servicios médicos y fármacos y por eso Moscú envía al país vecino convoyes humanitarios.
"Es todo lo que podemos hacer en esta situación", lamentó Medvédev añadiendo que Rusia "no puede apoyar lo ocurrido en Ucrania por diferentes razones".
Las autoridades ucranianas iniciaron en abril de 2014 una operación militar contra las milicias de Donbás, región cuyos habitantes protestaban contra el cambio violento de poder en el país.
Según los últimos datos de la ONU, el conflicto de Donbás causado más de 6.000 muertos. Más de 1,5 millones de ciudadanos se convirtieron en refugiados.