Esta conferencia no buscará "presionar a la comunidad internacional a fin de recolectar fondos para la reconstrucción del país", aseguró Lavréntiev al agregar que "se trata de considerar asuntos vinculados con la creación de condiciones decentes para el regreso de los refugiados".
Además, el enviado especial del presidente ruso expresó su esperanza de que el próximo intercambio de rehenes en Siria incluya a un total de 100 personas y que esta cifra aumente en el futuro.
En este contexto, Lavréntiev recordó que las autoridades de Damasco y la oposición se acusan de detener ilegalmente a más de 30.000 personas.
"Los sirios presentan listas de 16.000 encarcelados por la oposición, mientras los opositores dicen que, según sus datos, las autoridades sirias detienen de forma ilegítima a cerca de 15.000 personas", afirmó.
Sin embargo, el diplomático subrayó que se debe estudiar con atención estos datos y que con este fin fue creado el grupo de trabajo especial.
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El 28 y el 29 de noviembre se celebra el 11 ciclo de las consultas de Astaná que, junto con la plataforma de Ginebra, buscan resolver el conflicto sirio en el que las tropas gubernamentales luchan contra los grupos armados de la oposición y varias organizaciones terroristas desde 2011.
El primer intercambio tuvo lugar el 24 de noviembre cerca del poblado de Tadef, a 35 kilómetros al noreste de Alepo, en el que 10 civiles fueron canjeados por 10 miembros de la oposición armada siria.
El canje fue organizado con la participación de los representantes del Ministerio de Defensa ruso en el grupo de trabajo del formato de Astaná, así como de Irán, Turquía y de la Media Luna Roja Árabe Siria.
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