La noción de un 'Estado paria' —como también se le llama— no puede aplicarse automáticamente a "cualquier país que tiene objetivos que no nos gusten, o con los que no nos asociemos": cada país tiene sus intereses que difieren de los de EEUU, afirma Pillar.
Así, para que la acusación de 'Estado canalla' realmente tenga peso, el señalado debe actuar en contra del derecho internacional; y debe engañar y aplicar la violencia en situaciones donde las soluciones pacíficas están todavía disponibles, explica el investigador senior no residente de la Universidad de Georgetown y la Institución Brookings.
Tras esta decisión de la Corte, EEUU anunció su decisión de romper el acuerdo, algo que difícilmente habría sucedido si los jueces hubieran favorecido a Washington, opina Pillar.
El autor propone observar en este episodio la reacción del Gobierno de EEUU a una acción pacífica y conforme de Irán en una corte que respeta todos los procedimientos y el espíritu del derecho internacional
"Irán no ha hecho nada de 'canalla' en este caso. Es EEUU que declara ignorar las leyes internacionales, estándares y reglas para una solución pacífica de los conflictos, y afirma usar cualquier método para promover su campaña de hostilidad hacia otro Estado", apunta Pillar.
A los ejemplos de Pillar se puede agregar la más reciente retirada de EEUU del Tratado INF con Rusia, crucial para la seguridad internacional, así como la interpretación unilateral y no acordada del acuerdo sobre la utilización pacífica del plutonio de uso militar, otra vez ruso-estadounidense.
El 'Estado canalla' del Golfo Pérsico
"Todo esto tiene en el fondo el comportamiento descarado del mayor rival regional de Irán: Arabia Saudí", continúa el autor.
El asesinato del periodista Jamal Khashoggi en el consulado saudí en Ankara, supuestamente como consecuencia de 'una riña', aunque es "un caso extremo de la crueldad" de las acciones de Riad, no sería el primero, según Pillar.
El analista recuerda los bombardeos aéreos y el bloqueo de Yemen, que fomentan la peor crisis humanitaria del planeta y amenaza las vidas de millones de personas, así como el secuestro del primer ministro del Líbano con el fin de provocar una crisis política en ese país.
Opinión: Occidente-Arabia Saudí: realpolitik
Para el investigador este método saudí de resolver las discrepancias está muy lejos de la demanda de Irán contra EEUU en la Corte Internacional de Justicia, "que no tiene nada de canalla en sí".
Por eso, el analista concluye que "la campaña de hostilidad que lleva adelante la Administración Trump contra Irán no tiene que ver con su presunto estatus de 'paria' sino que tiene otros motivos".