Rusia, Turquía e Irán acuerdan seguir colaborando para eliminar ISIS y Al Nusra en Siria

TEHERÁN (Sputnik) — Los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y de Irán, Hasán Rohaní, acordaron en la cumbre en Teherán continuar colaborando para eliminar a los remanentes de los grupos terroristas ISIS y Frente Al Nusra, ambos proscritos en Rusia y otros países.

"[Los líderes] reafirmaron su determinación a continuar cooperando para eliminar definitivamente a ISIS, Frente Al Nusra y otros individuos, grupos, empresas y entidades relacionados con Al Qaeda [proscrito en Rusia] o ISIS, puesto que el Consejo de Seguridad de la ONU los catalogó como terroristas", se desprende de la declaración conjunta aprobada por los presidentes al finalizar la cumbre.

Las partes también subrayaron que lo más importante es separar a los yihadistas de los grupos armados de la oposición que se sumaron a la tregua o lo planean hacer.

Asimismo destacaron la necesidad de prevenir nuevas víctimas entre los civiles.

Los tres países firmaron una declaración de la cumbre tripartita sobre Siria en Teherán.

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Rusia, Turquía e Irán examinarán la posibilidad de convocar una conferencia internacional sobre los refugiados y desplazados sirios, publicó en su sitio web la Presidencia iraní.

Los presidentes Vladímir Putin, de Rusia; Recep Tayyip Erdogan, de Turquía; y Hasán Rohaní, de Irán, "acordaron considerar la idea de convocar una conferencia internacional sobre los refugiados y desplazados internos sirios", reza el documento.

Los líderes subrayaron la importancia de "crear condiciones para el retorno seguro y voluntario de los refugiados y desplazados internos a sus lugares originales de residencia en Siria".

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Con este fin, enfatizaron la necesidad de coordinación entre todas las partes relevantes, incluida la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y otras agencias internacionales especializadas.

Rusia, Turquía e Irán son cogarantes del llamado proceso de Astaná, que busca lograr una solución negociada al conflicto armado que desangra a Siria desde marzo de 2011.

La cumbre de Teherán se desarrolla en medio de expectativas de una operación militar en la provincia de Idlib, el último gran bastión de los terroristas en Siria.

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