"La operación realizada por Israel y sus súbditos es criminal, la misma mostró el verdadero carácter de los llamados Cascos Blancos, sobre cuyo peligro Siria ya alertó", declaró el Ministerio de Exteriores.
La organización, que contó con un gran apoyo de Occidente, supuestamente centraba su labor en la salvación de civiles en las zonas de combate, pero, en opinión de Damasco, se dedicaba a realizar una labor propagandística en contra de las autoridades del país.
Exclusiva: los Cascos Blancos, la joya de la "propaganda neocolonialista occidental"
Para el Ministerio de Exteriores de Siria, la evacuación de los Cascos Blancos, llevada a cabo en cooperación con EEUU, el Reino Unido, Jordania, Alemania y Canadá, revela que todos esos países apoyaban la labor de los extremistas en Siria.
El representante del Ministerio advirtió que Damasco espera de la OPAQ y de otros organismos que combaten el terrorismo que cambien su enfoque al respecto, ante todo tomando en cuenta que el país árabe no cuenta con armas químicas.
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La Cancillería rusa, por su parte, considera que los Cascos Blancos fueron una de las piezas de la gran campaña informativa que tiene como objetivo tergiversar toda la información sobre las autoridades de Siria.
Anteriormente el presidente sirio, Bashar Asad, aseguró que los miembros de ese grupo en realidad son partidarios de la organización terrorista Al Qaeda (proscrita en Rusia).
