El rey pidió la dimisión a Mulki y solicitó a Omar al Razzaz, hasta ahora ministro de Educación y un antiguo economista del Banco Mundial, que forme gobierno.
El reino hashemita ha sufrido el aumento de las tasas en las ventas de los productos y la abolición de los subsidios para el pan, un alimento básico para los pobres.
La economía jordana, que siempre ha sido débil, empezó a deteriorarse en los últimos años por la actitud de sus gobiernos recientes y porque el país ha tenido que hacer frente a la acogida de más de un millón de refugiados sirios, entre otros motivos.
Además: Jordania exportó a Rusia 3.000 toneladas de productos del agro en 2017
Las protestas fueron multitudinarias en Amán, la capital del país, y en otras ciudades como Aqaba, Salt y Al Karak, así como en diversas localidades de las provincias de Irbid y Jarash.
Por el momento, las fuerzas de seguridad jordanas se han mantenido contenidas y no han reprimido las protestas de forma violenta. Los manifestantes han intentado evitar los enfrentamientos físicos con ellas.
No obstante, 60 personas fueron arrestadas y 42 agentes resultaron levemente heridos, según informó el jefe de la policía jordana, el general Fadel al-Hamud, en una rueda de prensa.