El ingeniero Al Batash, de 35 años, fue asesinado la mañana del 21 de abril en Kuala Lumpur, la capital de Malasia, cuando se dirigía a una mezquita para rezar.
Pertenecía a Hamás y la organización islamista organizó el duelo en el campo de refugiados de Yabalia, donde reside la familia de la víctima.
Tanto Hamás como otros grupos palestinos, y la familia de Al Batash, han acusado a Israel del asesinato.
En declaraciones a la Radio del Ejército, Lieberman reveló que Israel pidió a Egipto que tampoco permita la entrada del cadáver en la Franja de Gaza a través del paso de Rafah.
Además: Hamás rechaza una propuesta de Israel para acabar con la Marcha del Retorno