"Estoy indignado por los continuos informes sobre el uso de armas químicas en la República Árabe Siria. Reitero mi enérgica condena al uso de armas químicas contra la población civil. Cualquier uso confirmado de armas químicas, por cualquiera de las partes en el conflicto y bajo cualquier circunstancia, es repudiable y constituye una clara violación de la ley internacional", declaró Guterres, quien asiste al Foro de Boao para Asia en la isla china de Hainan.
La gravedad de las recientes denuncias, según él, requiere "una investigación exhaustiva con expertos imparciales, independientes y profesionales".
"La Misión de Investigación debería tener acceso total, sin restricciones ni impedimentos para realizar sus actividades", subrayó.
La ONG Cascos Blancos, cuyos voluntarios se dedican al rescate de víctimas en zonas controladas por grupos rebeldes en Siria, denunció que un helicóptero lanzó el 7 de abril por la noche un barril con una sustancia química sobre la localidad de Duma, a las afueras de Damasco, causando más de 40 muertos y más de 500 afectados.
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Rusia sostiene que el supuesto empleo de agentes tóxicos en Duma, del que Occidente acusa al Gobierno de Bashar Asad, es "un montaje" y propone que expertos de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) lleven a cabo una investigación sobre el terreno.
