En las últimas semanas, la Policía reclutó a tres testigos de estado que se complementan entre sí y cuyas declaraciones podrían probar la culpabilidad de Netanyahu.
De acuerdo con la Policía, Hefetz dispone de pruebas definitivas que muestran que Netanyahu estableció una relación directa con el magnate de las telecomunicaciones Shaul Elovitch, principal accionista del emporio de telecomunicaciones Bezeq.
Demostrar la existencia de esta relación era el agujero negro de la investigación que ahora se rellenará con la declaración de Hefetz.
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Los investigadores sospechan que el primer ministro dio a Elovitch generosas ventajas en la regulación del mercado de las telecomunicaciones a cambio de obtener un tratamiento favorable en el popular portal de noticias Walla!, que también es propiedad de Elovitch.
Un segundo confidente de Netanyahu, Shlomo Filber, que fue director general del ministerio de Comunicaciones, cuyo ministro era Netanyahu, declaró a la Policía que Hefetz le pasaba mensajes del primer ministro, y que los dos se reunieron en varias ocasiones para discutir las ventajas que le darían a Elovitch.
La Policía cree que, además de esta mediación, Hefetz fue también el contacto entre Netanyahu, Elovitch y Walla!
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Mientras la investigación progresa, aumentan las especulaciones en el sentido de que Netanyahu podría convocar elecciones anticipadas, una posibilidad sobre la que el primer ministro todavía no se ha pronunciado de manera clara.
Sin embargo, la convocatoria de elecciones no frenaría la investigación de la Policía anticorrupción contra Netanyahu.