"Expresamos nuestra profunda preocupación por la crisis humanitaria después de esta ofensiva en la provincia de Idlib", dijo la entidad.
Agregó que "durante las últimas semanas decenas de miles de personas se vieron obligadas a abandonar sus hogares".
Además, el ente francés se mostró preocupado por la situación en el suburbio de Guta Oriental, cerca de Damasco.
"Francia está indignada por el hecho de que cientos de miles de civiles en Guta Oriental continúan viviendo bajo la presión del régimen de Bashar Asad, que se niega a realizar una evacuación médica urgente de cientos de personas, incluidos varios menores", agregó.
La Cancillería también llamó a "garantizar inmediatamente un acceso humanitario seguro, libre y total a todos los necesitados".
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La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (OACDH) comunicó que desde el 31 de diciembre al menos 85 civiles, entre ellos 21 mujeres y 30 menores, murieron y otros 183 resultaron heridos en Guta Oriental.
Más temprano el ministro de Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, acusó a Damasco de atacar las posiciones de los rebeldes moderados en la gobernación de Idlib.
El 4 de mayo Rusia, Turquía e Irán anunciaron la creación de cuatro zonas de distensión en el país árabe.
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Las zonas abarcan la provincia de Idlib, parte de las vecinas Latakia, Alepo y Hama, parte del norte de la provincia de Homs, Guta Oriental y determinadas zonas del sur de Siria, en las provincias de Deraa y Al Quneitra.
