"Seguimos expresando nuestra preocupación por la seguridad en el sur de Idlib y los suburbios de Hama en el noreste de Siria donde continúan las acciones de combate que ya provocaron bajas entre la población civil", dijo.
Laerke dijo que desde el 1 de diciembre de 2017 decenas de miles de personas fueron inscritas como desplazados internos por combates, la mayoría de ellas huyó a las regiones del noroeste y del sur de Idlib.
"Consideramos que casi dos millones de personas se encuentran en la provincia de Idlib la mitad de las cuales quedó desplazada antes de la reciente escalada de violencia", dijo.
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El portavoz subrayó que la ONU se esfuerza por proporcionar la ayuda necesaria a los civiles pero su actividad se ve obstaculizada por la falta de seguridad.