La carta va dirigida al primer ministro, Benjamín Netanyahu, al titular de Defensa, Avigdor Lieberman, al ministro de Educación, Naftalí Bennett, y al jefe del ejército, el general Gadi Eizenkot.
"El ejército aplica la política de un gobierno racista que viola los derechos humanos básicos y aplica una ley a los israelíes y otra a los palestinos en la misma área", dicen los estudiantes.
"En consecuencia hemos decidido no tomar parte en la ocupación y opresión del pueblo palestino, que separa a la gente en dos campos hostiles. Durante el tiempo que la gente viva bajo una ocupación que les niega los derechos humanos y los derechos nacionales, no podremos conseguir la paz", afirman los firmantes.
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Los estudiantes, que denuncian el "militarismo" que los jóvenes israelíes sufren desde la escuela, añaden que aspiran a "cambiar todo el sistema" y acusan al gobierno de que no haya paz con los palestinos.
Así mismo denuncian que en Israel no hay libertad para contar lo que realmente está sucediendo en los territorios palestinos ocupados.