La policía palestina informó a la prensa local de que "centenares de colonos israelíes escoltados por el ejército entraron en la tumba de José, en Nablus para rezar".
Los enfrentamientos estallaron horas después cuando jóvenes palestinos protestaron ante la presencia de los colonos en esta área palestina.
La tumba de José es un foco de tensión permanente entre israelíes y palestinos. El lugar se sitúa en el campo de refugiados de Balata de Nablus y es frecuentado por colonos y judíos ortodoxos pese a que se encuentra en la llamada área A de Cisjordania, donde la Autoridad Palestina posee el control administrativo y de seguridad.
Los judíos lo veneran como el lugar donde fue enterrado José, hijo de Jacob, que fue vendido por sus hermanos a unos mercaderes que le llevaron a Egipto.
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Su historia marca el inicio de la expansión de las 12 tribus de Israel. Para los musulmanes en este punto está enterrada una autoridad religiosa musulmana fallecida en la época otomana.
La tumba fue restaurada después de que Israel ocupara Cisjordania en 1967, tras la Guerra de los Seis Días.