Ahora, Rusia contribuye a la victoria eventual del presidente Bashar Asad, aunque todavía el fin de las hostilidades está lejos.
Eficacia
El autor califica los recursos gastados diariamente para la operación de Moscú como "bastante limitados" y los estima de tan solo una cuarta o quinta parte de lo que gasta EEUU al día en operaciones semejantes.
"Según los resultados obtenidos, es indiscutible que la eficacia operativa de los rusos es muy superior a la de EEUU o Francia", calificó.
Las fuerzas rusas aparecieron en Siria rápidamente y no tardaron tiempo en atacar masivamente las posiciones de sus enemigos, recordó Goya. "No hubo ni declaraciones ni despliegue gradual, como lo hicieron los estadounidenses", comentó.
Además, el historiador teoriza que Rusia se adhiere a la estrategia del "peatón imprudente", avanzando por diferentes partes del país y obligando a EEUU a cesar sus operaciones por temor a un eventual enfrentamiento directo con las fuerzas de Moscú.
El escudo aéreo
El despliegue de los sistemas antiaéreos modernos rusos en Siria limitó la libertad de las acciones de EEUU. No fueron dirigidos contra la inexistente aviación de los opositores armados o yihadistas, según Goya, pero sí impusieron una zona de exclusión aérea para los aviones estadounidenses la cual no se atrevían a penetrar.
Operaciones combinadas
Pero más allá de las operaciones bélicas, el Centro de reconciliación, encargado de promover los contactos diplomáticos entre los múltiples bandos beligerantes, coordina las acciones humanitarias con las autoridades locales, las ONG internacionales y la ONU, destaca Goya.
Bajas reducidas
A inicios del conflicto Rusia se vio reiteradamente acusada de la escasa precisión de sus ataques y las muertes de los civiles. No obstante, "es indiscutible que a lo largo del conflicto las pérdidas civiles se redujeron notablemente", según el experto, hasta que ahora se sitúen por debajo de las causadas por la coalición liderada por EEUU.
Las bajas en las filas rusas, también, han sido mínimas. Las cifras tanto oficiales como teorizadas son, en todo caso, "minúsculas".
Pruebas reales
También, el Ejército ruso experimentó con varios conceptos de guerra moderna.
El primero es el innovador sistema de puntería satelital para las municiones no guiadas, el SVP-24. Este módulo permite lanzar bombas de caída libre con precisión "comparable a una fuerza más sofisticada y mucho más cara", destacó.
La segunda idea radica en el uso de la infantería motorizada ultraligera, dotada con todoterrenos ligeros y veloces.
Finalmente, en Siria fue bautizado con fuego el vehículo de apoyo de tanques, capaz de sustituir por sí mismo a toda una unidad de escolta de tanques.
