"Los desplazados internos se enfrentan a problemas por todo el territorio del país, en varias zonas, sobre todo en las que están controladas por el Gobierno, la influencia de las sanciones ilegales unilaterales llevó a un alza de los precios y a una reducción de la cantidad de los alimentos en los mercados locales", dijo.
A inicios de mayo EEUU extendió por un año más las sanciones en contra del Gobierno de Damasco, y a finales del mismo mes la Unión Europea prolongó hasta el 1 de junio de 2018 sus limitaciones unilaterales que pesan sobre Siria desde diciembre de 2014.
Las medidas incluyen la prohibición de viajes a la UE y congelación de los activos europeos de los funcionarios sirios, además imponen un embargo petrolero y restringen las inversiones en el país.