La dimisión se produjo tras recibir una serie de acusaciones de destacados rabinos que denunciaron su participación en la ceremonia.
Guetta instó a su familia a que asistiera en pleno a la boda aunque les advirtió que de acuerdo con la Torá (el Pentateuco), esa boda "estaba prohibida y era una abominación".
La asistencia de Guetta provocó inmediatamente una serie de reacciones en su contra y cinco rabinos ilustres le acusaron públicamente de "desacralizar la voluntad de Dios" y exigieron su dimisión.
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El líder del partido Shas, Arye Deri, aceptó la dimisión pero dijo que confía en que Guetta siga jugando un papel significativo en las actividades del partido.