En el documento se denunció los casos de negación del Holocausto, la profanación de los memoriales y los lugares de entierro de las víctimas de Holocausto y los soldados del Ejército Rojo y la refutación del papel de Ejército Rojo en la victoria sobre el nazismo en varios países europeos.
"Cada país del mundo debe expresar claramente su condena a la profanación de memoriales a las víctimas del Holocausto y los héroes de la Segunda Guerra Mundial, los soldados del Ejército Rojo que liberaron Europa del fascismo", dice el texto al que tuvo acceso Sputnik.
Horas antes la Duma de Estado (Cámara baja del Parlamento ruso) aprobó una petición donde llamó a los parlamentarios europeos a oponerse a la destrucción y la profanación de los monumentos a los soldados que liberaron a Europa del nazismo y unir los esfuerzos para impedir todo intento de rehabilitar el fascismo en cualquiera de sus formas.
Las iniciativas de Rusia y Polonia se enmarcan en el contexto de la controvertida ley de Polonia para demoler los monumentos de la época soviética.
De acuerdo con las enmiendas, "se hará imposible instalar monumentos que promuevan cualquier régimen totalitario".
Los monumentos "no pueden conmemorar a personas, eventos o fechas que simbolicen el comunismo o cualquier otro sistema totalitario", dice el documento que señala la prohibición expresa de su promoción.
Al mismo tiempo la prohibición no afecta a instalaciones que estén escondidas al público y que se encuentren en "un cementerio o cualquier otro lugar donde yazcan muertos" y tampoco las exhibidas públicamente como parte de una actividad artística o relativa a educación, colección e investigación "para fines distintos de la promoción del régimen totalitario", así como las inscritas en el registro de monumentos.