"La delegación de las fuerzas militares revolucionarias de Siria recibimos la invitación a la tercera reunión en Astaná pero ponemos (…) condiciones para cualquier ronda de negociaciones", dijo la delegación opositora en un comunicado.
A la vez, reclaman que se respete plenamente el alto el fuego en las zonas controladas por la oposición, se ponga fin al "desplazamiento forzoso" en varios distritos y cesen los "debates sobre los mecanismos del armisticio".
Tras la primera conferencia en Astaná, a mediados de enero pasado, Rusia, Irán y Turquía anunciaron la decisión de establecer un instrumento a tres bandas para vigilar el cumplimiento de la tregua en Siria.
La segunda reunión en la capital kazaja se celebró a mediados de febrero, y la próxima deberá realizarse del 14 al 15 de marzo.
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Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado que ha causado entre 300.000 y 400.000 muertos, según datos de la ONU.
Las tropas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas, entre ellas Daesh (autodenominado Estado Islámico) y el Frente al Nusra, ambas proscritas en varios países, incluida Rusia.
