Safrónkov señaló que el borrador de resolución del Consejo de Seguridad de la ONU votado este martes, que suponía imponer sanciones contra Siria, parece tener un objetivo de "responsabilizar al Gobierno de Asad por el uso de armas químicas, creando así unas condiciones adicionales para cambiar del poder en Damasco".
"La obsesión por este proyecto geopolítico todavía obstaculiza pensar claramente y tomar decisiones equilibradas para lograr la solución política no solo en Siria, sino también en otros numerosos focos de tensión en Oriente Próximo", dijo.
Este martes China y Rusia vetaron la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, presentada por Francia y el Reino Unido para imponer sanciones contra los presuntamente involucrados en el uso de armas químicas en Siria en 2014 y 2015.
La propuesta contó con el apoyo de nueve países, tres abstenciones (Kazajistán, Egipto y Etiopía) y tres votos en contra por Rusia, China y Bolivia.
Este 28 de febrero el presidente ruso, Vladímir Putin, declaró que las sanciones contra el Gobierno sirio son totalmente inapropiadas en la etapa actual del desarrollo de la situación en Siria.
El Kremlin advierte de las terribles consecuencias de la dimisión de #Asad https://t.co/PE1lpNhmVu pic.twitter.com/zwgrgAFUFi
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 22 октября 2016 г.
En particular, indicó que las nuevas sanciones podrían obstaculizar el proceso negociador entre el Gobierno de Damasco y la oposición siria, o "socavar la confianza".
En los últimos meses, Rusia realizó intensas gestiones diplomáticas en cooperación con Turquía e Irán para lograr la retirada de los grupos armados de Alepo y establecer un alto el fuego en Siria vigente desde el 30 de diciembre.
Lea más: Rusia no apoyará nuevas sanciones contra Siria en el Consejo de Seguridad de la ONU
Además, los tres países lograron organizar en Astaná dos encuentros internacionales con la asistencia de representantes de Damasco y la oposición armada, que contribuyeron a la reanudación de las consultas sirias en Ginebra.