Esa es la opinión de Daniel Byman, analista de Brookings Institution, quien considera que la operación en Mosul no será nada sencilla para la coalición.
"Aunque los militares norteamericanos estiman que el número de extremistas de Daesh en Mosul es de tan solo entre 3.000 y 4.500, en comparación con las decenas de miles de miembros de las fuerzas de la coalición —sin hablar de la ventaja que supone el poder aéreo de EEUU—, los yihadistas disfrutan de considerables ventajas por su posición en la ciudad", subraya Byman.
El analista explica que los kurdos iraquíes han empezado a liberar las aldeas al este de Mosul, mientras que las tribus sunitas, las fuerzas iraquíes y las milicias chiitas también participan en la ofensiva.
"El Estado Islámico (grupo terrorista, proscrito en Rusia y otros países) intentará aprovecharse de esos problemas… Los triunfos se pueden terminar o al menos debilitar, y puede que Daesh intente incrementar el terrorismo internacional mientras cede su territorio", señala el experto.
Por otro lado, puede que la intención de EEUU sea que los terroristas que abandonan Mosul se retiren a zonas en Siria controladas por Daesh, opina Salman Rafi Sheij, analista político de New Eastern Outlook.
"Si Mosul cae, todo el 'Ejército del Califato' del autodenominado Estado Islámico puede verse dirigido contra el Gobierno de Asad y sus aliados, un escenario que seguramente satisfará a Washington".
Situaciones similares ya han sido observadas, resalta el experto, recordando que cuando la ciudad iraquí de Faluya fue retomada por el Ejército de Irak, las fuerzas de Daesh se dirigieron a Siria y reiniciaron su lucha contra el Ejército sirio.
Ya se han registrado reportes de vehículos con militantes de Daesh que han arribado a la ciudad siria de Al Raqa, después de que empezara la operación de la coalición en Mosul, y medios árabes han hablado de la llegada de más de 100 altos mandos de Daesh a Siria.
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Hoshawi Babakr, miembro del Partido Democrático de Kurdistán, confirmó a RIA Nóvosti que las milicias kurdas podrían permitir a los combatientes de Daesh abandonar la ciudad, para asegurar una victoria conjunta del Ejército iraquí y de las organizaciones kurdas.
Mientras tanto, EEUU da muestras de querer usar a los extremistas contra Asad, razón por la que no está dispuesto a separar a la así llamada Oposición Moderada de los yihadistas o a aceptar las propuestas rusas en la ONU.
