"Hemos sacado cinco cuerpos de civiles, es posible que haya más víctimas", dijo el miliciano al reportero de RIA Novosti.
En la escena trabajan soldados, milicianos, bomberos y voluntarios, mientras la mayoría de los vecinos permanece escondida en el interior de sus casas.
Las tropas gubernamentales continúan entretanto la ofensiva en el barrio adyacente, Suleiman al Halabi, donde se ubica una estación de bombeo que suministra agua potable a toda la ciudad.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU estima que en el este de Alepo permanecen atrapadas entre 250.000 y 275.000 personas que necesitan urgente protección y ayuda humanitaria.
Unos 320 civiles murieron y 765 resultaron heridos en Alepo en los primeros días de la ofensiva que el Ejército gubernamental reanudó el 22 de septiembre, dijo el secretario general adjunto de Asuntos Humanitarios y Coordinador de Ayuda de Emergencia de la ONU, Stephen O'Brien.