Las protestas empezaron en Diyarbakir el martes, los habitantes de la ciudad cerraron las tiendas, los colegios y las guarderías.
El copresidente del Congreso de la Sociedad Democrática (DTK), una influyente alianza de ONG kurdas, Hatip Dicle informó que las protestas durarían tres días y la continuación dependerá de la situación.
A lo largo del día los residentes de Diyarbakir empezaron a reunirse en el centro de la ciudad cerca del "Congreso de la sociedad democrática", el edificio, que sirve como una especie de cuartel general de las manifestaciones pacíficas. Los activistas comenzaron a aplaudir, gritar y silbar.
Más tarde en las calles cercanas se reunieron varios miles de personas.
La policía que llegó posteriormente empleó gases lacrimógenos y agua para dispersar a la multitud. Varios activistas fueron detenidos.
Ahora el centro de Diyarbakir se vacío, pero los activistas dicen que continuarán la manifestación al anochecer.
En el centro de la ciudad se sitúa el distrito histórico Sur, donde se han registrado en los últimos meses enfrentamientos entre las fuerzas turcas y los combatientes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
El alcalde de Diyarbakir, Firat Anli, informó a la agencia que cerca de 50.000 habitantes de los 70.000 abandonaron sus casas.
En diciembre de 2015, Ankara declaró el toque de queda en varias localidades de mayoría kurda en el sureste del país, en particular, en Cizre y Silopi de la provincia de Sirnak, en el distrito histórico de Sur de Diyarbakir, y también en la ciudad de Nísibis de la provincia de Mardin.