"Esperamos de nuestros electores un gran apoyo y confiamos en grandes resultados", dijo Lieberman, quien se mostró confiado en que su partido alcanzaría más de 10 escaños de la Kneset en estas elecciones.
Según las leyes israelíes, los 120 escaños de la Kneset se reparten de acuerdo al porcentaje que correspondió a cada partido político como resultado de la votación nacional total.
Sin embargo el umbral mínimo requerido para que un partido pueda acceder a escaños es el de 3,25% del total de los votos emitidos.
El canciller israelí también expresó que aspira a ocupar en el próximo gobierno la anhelada cartera de ministro de Defensa.
Las tres últimas encuestas de opinión, incluyendo la realizada por el Canal 10 de Israel el pasado viernes, ubican la intención de voto del partido de extrema derecha de Lieberman que permitiría a la formación política aspirar entre 4 y 5 escaños.
Actualmente, Yisrael Beytenu cuenta con 13 escaños en la Kneset.
A su vez, el exjefe de Nativ, la agencia del gobierno israelí que promueve la inmigración de los países exintegrantes de la Unión Soviética,Yakov Kedmi, comentó a Sputnik Nóvosti que la desventaja de Yisrael Beytenu se debe a que sus potenciales votantes entran en la categoría de edad correspondiente a los mayores de 40 años.
Según el experto político, el partido debería organizarlos e incluso transportarlos a los colegios electorales.
Kermit subrayó que esta tarea no será fácil para Yisrael Beytenu en un momento en que 20 miembros de alto rango de esta formación son objeto de investigaciones legales.
En diciembre pasado, la policía anunció una serie de detenciones de altos funcionarios de este partido político, por su presunta implicación en una importante trama de corrupción, que incluye sobornos, las preferencias y el fraude.
Este 17 de marzo, Israel celebrará sus elecciones parlamentarias.
En diciembre de 2014, Netanyahu disolvió el parlamento y convocó a elecciones anticipadas en marzo, dos años antes de la fecha establecida.
