El presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, acordaron el 5 de marzo en Moscú un alto el fuego en Idlib que rige desde las primeras horas del 6 de marzo.
"Después de la cumbre ya hubo muchas violaciones de la tregua de la parte turca, incluso después de las negociaciones entre el presidente Putin y Erdogan hubo muchas infracciones", dijo la funcionaria.
Shaaban subrayó que Siria sigue cumpliendo el régimen de alto el fuego.
"Estamos dispuestos a cumplir el alto el fuego, y todos cumpliremos los compromisos asumidos, la tregua corresponde a nuestra meta, que es derrotar el terrorismo y alcanzar la paz", dijo.
Según la funcionaria, Damasco espera que los países de la OTAN y la UE condenen las acciones de Ankara en Siria que "van en contra de todas las leyes internacionales".
Putin y Erdogan acodaron durante el encuentro en Moscú que realizarían un patrullaje conjunto de la importante autopista M4, que une las ciudades de Saraqib y Latakia y que actualmente se encuentra en manos de grupos terroristas, así como la creación de un corredor de seguridad.
La situación en la provincia siria de Idlib se agravó después de que el grupo terrorista Hayat Tahrir al Sham (anteriormente conocido como Frente al Nusra, prohibido en Rusia) lanzara ataques masivos contra el Ejército sirio.
Las fuerzas gubernamentales respondieron con una operación aérea que dejó una treintena de víctimas mortales entre los militares turcos que no debían encontrarse en la zona.
Moscú insiste en el cumplimiento de los acuerdos de Sochi de septiembre de 2018, según los cuales Ankara se comprometió a separar a los opositores armados sirios de los grupos terroristas que operan en Idlib, algo que hasta el momento no se ha efectuado.
