"La aviación militar de las Fuerzas de Defensa de Israel atacó 15 objetivos en el norte y en el centro de la Franja, incluidas fábricas de armamento, varias instalaciones de las fuerzas navales y un túnel de ofensiva perteneciente al grupo Hamás", dice un comunicado del servicio de prensa de los militares.
Se agrega que el Ejército israelí seguirá luchando contra ataques a los civiles y responsabiliza a Hamás de cualquier agresión proveniente de Gaza.
Fuentes palestinas citadas por medios de comunicación palestinos e israelíes señalaron que Israel había llevado a cabo varios ataques aéreos cerca de la ciudad de Deir al Balah, en el centro de Gaza, y también en el norte de la franja.
Los dos proyectiles se lanzaron hacia las ciudades de Ashdod y Ashkelon, en el sur de Israel, cerca de Gaza, precisamente cuando el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se encontraba en pleno mitin de campaña electoral en Ashdod.
El servicio de seguridad personal del primer ministro lo sacó del escenario en cuanto sonaron las alarmas de alerta por ataques en la zona.
Mientras, en Ashkelon, otra ciudad muy cercana a Gaza, el general retirado Gabi Ashkenazi, hablaba en un mitin de campaña de la coalición Azul y Blanco, rival del Likud, partido de Netanyahu. Cuando las sirenas sonaron, Ashkenazi no se movió del escenario en el que hablaba.
Los líderes de varios partidos criticaron a Netanyahu por haber abandonado el acto de campaña a causa de las sirenas.
Yair Lapid, de Azul y Blanco, dijo que este hecho demuestra que "Netanyahu está acabado y puede abandonar el escenario".
El incidente del 10 de septiembre se suma a semanas de tensión entre Israel y el movimiento Hamás, que controla Gaza, y entre los israelíes y el grupo chií libanés Hizbulá.