"Nuestro futuro no debería decidirse en el exterior, en las capitales de los países amigos, enemigos o vecinos (...) No queremos que se inmiscuyan en nuestros asuntos", dijo Ghani en un acto público en declaraciones recogidas por la cadena televisiva 1TV.
El mandatario recalcó que "el destino de Afganistán se decidirá en suelo afgano".
Agregó que las elecciones presidenciales previstas para finales de septiembre serán cruciales para el país y es que se otorgará al jefe de Estado amplios poderes para tomar decisiones duras e implementarlas.
El Gobierno afgano ha criticado en reiteradas ocasiones ese proceso ya que ha sido excluido del mismo.
Afganistán vive una situación de inestabilidad a raíz de los ataques que lanzan los talibanes y, desde 2015, el grupo terrorista ISIS (autodenominado Estado Islámico y prohibido en Rusia y otros países), pese a la fuerte presencia militar de EEUU y sus aliados.
Hasta ahora, los talibanes han condicionado el proceso de paz en Afganistán a la retirada de las tropas extranjeras e insisten en acordar el calendario de su repliegue con EEUU, no con el Gobierno de Kabul.