El enfrentamiento se produjo en el ámbito de la operación Garra 2, continuación de la operación Garra, anunciada por el Ministerio de Defensa en mayo y dirigida contra el PKK, catalogado como organización terrorista por Ankara.
"Murió un compañero nuestro y otros seis militares resultaron heridos. La operación continúa y cuenta con el apoyo de la aviación", destaca el comunicado del Ministerio de Defensa turco.
También indica que otro choque armado entre los militares turcos y los miembros del PKK tuvo lugar en la provincia de Bitlis, en el sudeste de Turquía.
El conflicto entre Turquía y el PKK se recrudeció en 2015, después de que fracasara el alto el fuego acordado en 2013, tras una serie de ataques terroristas de los que Ankara culpó a la organización kurda.
Desde julio de 2015, unos 1.000 militares y policías turcos, así como unos 500 civiles, murieron como resultado de los ataques de insurgentes kurdos.
El Ministerio de Defensa de Turquía estima que en el mismo período fueron neutralizados más de 10.000 combatientes del PKK.