"Irán pretende fortalecer la seguridad en la región y no busca enfrentamiento con otros países o grandes fuerzas; pero si actúan de manera imprudente, sin duda enfrentarán una respuesta decisiva que les hará lamentarlo", dijo Rohaní.
Durante la conversación los dos líderes también abordaron los problemas de Oriente Medio y coincidieron en que el diálogo es la única solución posible.
Rohaní también saludó la posición de Catar en la cumbre en La Meca, al subrayar que esta postura ayuda a reducir las tensiones.
En el comunicado final, leído por el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit, los participantes de la cumbre condenaron la injerencia de Teherán en los asuntos internos de otros países, en particular su intervención en el conflicto de Siria, entre otras cosas.
A su vez, los países del golfo Pérsico llamaron a evitar que Irán desarrolle armas nucleares e imponer restricciones más estrictas a su programa de misiles balísticos.
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El ministro de Asuntos Exteriores de Catar, Mohammed bin Abdulrahman al Thani, expresó su desacuerdo con ciertas disposiciones de la declaración final.
