"Israel está intentando por todos los medios legitimar lo dispuesto sobre nuestro dinero", dijo Abás durante una reunión del gobierno palestino en Ramala.
Abás cifró el dinero que le debe Israel en 100 millones de dólares mensuales.
Desde hace meses los palestinos no recibieron el dinero que Israel les retiene mensualmente por concepto de impuestos y que luego le entrega a finales de cada mes.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, hace varios meses que no entrega ese dinero porque la Autoridad Palestina (AP) se niega a recibirlo de una manera incompleta.
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Israel quiere reducir de esos impuestos las cantidades que la AP entrega a los milicianos palestinos encarcelados en Israel y a sus familias por concepto de compensaciones, algo que no acepta la AP.
Israel argumenta que de esa manera la AP está incitando al terrorismo.
"Queremos vivir en paz con los israelíes, como vecinos, pero no a cualquier precio", dijo Abás.
La retención de los impuestos causa tensiones graves en la economía palestina, así como el peligro de que la AP acabe colapsándose.