Según declaró a Sputnik la experta Vera Lucia Viegas Liquidato, de la Fundación Escuela de Comercio Alvares Penteado (FECAP), el acercamiento entre Brasil e Israel podría provocar represalias por parte de los Estados musulmanes.
"No puede convertirse en un protagonista si no es un mediador neutral", expresó Liquidato.
La analista admitió que la política exterior de Brasil también puede traer consecuencias negativas para la economía del país latinoamericano, su balanza comercial y su imagen en el escenario mundial.
Según subrayó Liquidato, el país podría hacer mucho más para resolver los problemas más urgentes en su región, como, por ejemplo, la admisión de refugiados venezolanos.
"Cuando Brasil participa en una cumbre sobre la paz en Oriente Medio, esto indica que su política exterior es incoherente", señaló la experta.
Según explicó Liquidato, los objetivos de la política exterior del país latinoamericano "no están fijados, y no es bueno".
La analista comparó el rumbo político de Bolsonaro con un "bote que salió de su curso, que no tiene coordenadas y no sabe qué ruta debe seguir".
La Cumbre sobre Oriente Medio, convocada por EEUU y en la que participaron, entre otros, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo y el ministro de Exteriores de Brasil, Ernesto Araujo, tuvo lugar en Varsovia los días 13 y 14 de febrero.
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