El anuncio se produjo después de que el jefe del Shin Bet (servicio de seguridad interna israelí), Nadav Argaman, indicara que un Estado al que no podía nombrar por orden de la censura militar iba a intentar intervenir en los comicios a través de ataques cibernéticos.
Funcionarios israelíes se habían reunido con altos representantes de Facebook, que podría ser una vía para los ataques cibernéticos.
Según el comité electoral, todos los organismos involucrados en el proceso de celebración de las elecciones han sido alertados, aunque señaló que no podía detallar qué acciones se están tomando por razones de seguridad.
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Israel utiliza papeletas de voto, hecho que hace que el recuento real de votos sea menos vulnerable al fraude electoral.
Sin embargo, el país aún no posee toda la capacidad necesaria para abordar la manipulación de votantes políticamente motivada a través de plataformas de medios sociales a gran escala.