"Es un ejemplo de lo que estamos intentando evitar a una escala mucho mayor… Es un guion de la escalada que debemos detener urgentemente", dijo al comentar el incidente con el avión Il-20 ruso en Siria la semana pasada.
En la noche del 17 de septiembre, la base aérea rusa en Hmeymim, cerca de Latakia, perdió la comunicación con un avión de reconocimiento IL-20 que estaba regresando al aeródromo y se encontraba a unos 35 kilómetros de la costa siria.
Al día siguiente, el Ministerio de Defensa de Rusia informó que el Il-20 fue derribado por un misil del sistema S-200 de la defensa antiaérea siria, lo que provocó la muerte de los 15 efectivos que iban a bordo.
Más: Derribo del Il-20: ¿hay antecedentes de la 'torpeza' de las cazas israelíes?
Según el departamento castrense, cuatro cazas israelíes F-16 estaban atacando en aquellos momentos instalaciones en Latakia y usaron al Il-20 como escudo, exponiéndolo al fuego del sistema sirio de defensa antiaérea.
Israel lamentó el derribo del Il-20 y atribuyó la responsabilidad a Damasco, Teherán y al movimiento chií libanés Hizbulá.
Estados Unidos no va a obligar por la fuerza a Irán a salir de Siria y solo sería una presión política, declaró Jeffrey.
"No vamos a obligar a los iraníes a salir de Siria, no podemos forzarlos… Pienso que tampoco Rusia podría obligarlos a marcharse porque supondría el uso de la fuerza militar… Entonces, sería una presión política", dijo.
EEUU busca que las fuerzas iraníes abandonen el territorio sirio como condición para prestar ayuda en la restauración de Siria.
Asuntos relacionados: La tragedia del Il-20, ¿resultado de la agresión israelí al acuerdo entre Rusia y Turquía?
Estados Unidos parte de que la situación en la gobernación siria de Idlib está "congelada", declaró James Jeffrey.
"Para nosotros la situación en Idlib actualmente está congelada", dijo.
Según agregó, EEUU "está ejerciendo presión para congelar ese conflicto de cualquier manera posible".
El presidente de EEUU, Donald Trump, durante una reciente reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, agradeció a Rusia, Siria e Irán por haber detenido la ofensiva en la gobernación de Idlib, último baluarte de la oposición armada siria y de algunos grupos terroristas.
El 17 de septiembre, en la ciudad rusa de Sochi, los líderes de Rusia y de Turquía, Vladímir Putin y Recep Tayyip Erdogan, acordaron establecer para el 15 de octubre una zona desmilitarizada en Idlib en la línea de separación entre la oposición armada y las tropas sirias.
Más: Trump agradece a Irán, Rusia y Siria por "frenar" operación en Idlib
La zona estará controlada por las tropas turcas y la policía militar rusa.
En virtud de los pactos entre las facciones insurgentes y Damasco, se fueron trasladando a Idlib los grupos que se negaron a abandonar la lucha armada durante las operaciones antiterroristas de Alepo, Homs, Guta Oriental, Deraa y Al Quneitra.
En 2017, Idlib pasó a integrar una zona de distensión patrocinada por Turquía.
Damasco declaró en julio pasado que se reservaba el derecho de usar la fuerza militar para liberar Idlib si los insurgentes rechazan el proceso de reconciliación.