La declaración conjunta del director ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos, David Beasley, el director ejecutivo del Fondo de la ONU para la Infancia, Anthony Lake, y el director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, emitida este 16 de noviembre subraya que el levantamiento parcial del bloqueo a Yemen no permitió mejorar la situación humanitaria en el país.
"A pesar de que la coalición militar liderada por Arabia Saudí levantó parcialmente el bloqueo a Yemen, el cierre de gran parte de los puertos aéreos, marítimos y terrestres del país está empeorando la situación catastrófica (…) juntos volvemos a llamar a la coalición que permita el suministro de artículos necesarios a Yemen en condiciones de la peor crisis humanitaria del mundo", dice la declaración.
Además, al menos 14,8 millones de habitantes de Yemen carecen de atención médica básica y ya fueron detectados más de 900.000 casos sospechosos de cólera en el país.
"Incluso con un levantamiento parcial del bloqueo, el Programa Mundial de Alimentos estima que otros 3,2 millones de personas podrían enfrentarse a la hambruna, si la situación no cambia, 150.000 niños desnutridos podrían morir en los próximos meses", agrega el documento.
Al mismo tiempo, los especialistas de organizaciones humanitarias advierten que si el bloqueo no se levanta, aparecerá la posibilidad de un nuevo brote de cólera.
"Todos los puertos del país, incluidos los controlados por la oposición, deben reabrirse sin demora, es la única posibilidad para la ONU de entregar la carga humanitaria necesaria para que la población pueda sobrevivir", puntualiza la declaración.
El 13 de noviembre la oficina de representación saudí ante la ONU, Abdalá Muallimi, informó que coalición liderada por Riad reabrirá en las próximas 24 horas todos los puertos en las áreas controladas por el Gobierno de Yemen.
