"La situación en Guta Oriental puede caracterizarse a grandes rasgos como satisfactoria, la ayuda humanitaria está llegando, las fuerzas gubernamentales no crean ningún obstáculo al suministro de ayuda humanitaria por la línea de la ONU", dijo el representante ruso.
"Todavía no logramos derrotarlos definitivamente, la lucha continúa", destacó el enviado especial.
Días antes los habitantes de varias localidades de Guta Oriental acusaron a los combatientes de la organización terrorista Frente al Nusra de haber confiscado la ayuda humanitaria para luego venderla a precios desorbitados a la población.
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Asimismo, comunicó que Rusia ejercerá como mediador entre militares sirios y turcos.
"De momento no hay coordinación directa entre el Gobierno sirio y los militares turcos, probablemente Rusia ejercerá como mediador", dijo a la prensa.
Este 30 de octubre arrancó la séptima ronda de las consultas sirias de Astaná, una de las dos plataformas que buscan una solución política al conflicto armado en Siria.
Al encuentro asistirán también representantes de la ONU, Estados Unidos y Jordania en calidad de observadores.
La coordinación de despliegue de los observadores turcos e iraníes en Siria sigue desarrollándose en Astaná en el marco de la séptima ronda de diálogos sirios que se celebra los días 30 y 31 de octubre en la capital kazaja.
"Como saben, los observadores turcos y rusos se encuentran ya (en las zonas de distensión), seguimos acordando el proceso de despliegue de los observadores turcos e iraníes", dijo Lavréntiev.
Recordó también que los observadores rusos trabajaron ya en la zona de Idlib y que hace un mes y medio fueron establecidos allí cerca de 10 puestos de observación rusos.
No obstante, afirmó Lavréntiev, en estos momentos "se está desarrollando el proceso de retorno" de los observadores rusos a ese territorio.
Previamente, el enviado del presidente ruso para Siria advirtió que se mantiene alto el riesgo de nuevos ataques de los grupos terroristas en Idlib.
Lavréntiev instó al Ejército turco a acelerar el despliegue de los puestos de observación para conjurar posibles incursiones de los radicales que operan en la zona.
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Rusia, Turquía e Irán, países garantes del proceso de paz sirio, anunciaron la creación de cuatro zonas de distensión en la cuarta ronda de las negociaciones que se celebraron el 3 y 4 de mayo.
La primera zona de distensión en Al Quneitra, Suwaida y Deraa, suroeste de Siria, entró en vigor el pasado 9 de julio.
La segunda área, en Guta Oriental, empezó a funcionar el 22 de julio y la tercera, en el norte de Homs, el 3 de agosto.
A mediados de octubre el Ejército turco envió 200 soldados, ocho tanques y 50 vehículos blindados a Idlib para establecer la cuarta zona de distensión.
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Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado en el que las tropas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas.
Las hostilidades, según datos de altos cargos de la ONU, han dejado hasta la fecha unos 400.000 muertos.
