"Esta decisión se tomó el viernes por la mañana y prevé el cierre de todos los puentes que conectan ambas partes de Mosul para los periodistas y los civiles", dijo el militar.
Explicó que la decisión se debe al temor de que la vida de los periodistas pueda correr peligro en esa zona.
La fuente también comunicó que en varias zonas de la ciudad los militares desminan caminos y edificios, mientras en el casco antiguo continúan los enfrentamientos con los terroristas de Daesh (o Estado Islámico, prohibido en Rusia).
Según el militar, la prohibición con toda probabilidad será vigente durante varios días.
El 10 de julio el primer ministro iraquí, Haider al Abadi, proclamó la derrota total de Daesh en Mosul, tras una ofensiva militar que se prolongó nueve meses.
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Desde 2014 los yihadistas controlan una parte del territorio de Irak y de la vecina Siria, perpetrando numerosas atrocidades en las zonas ocupadas, entre ellas ejecuciones masivas, secuestros y violaciones sistemáticas.