"Los suministros de armas pesadas a YPG ya de por sí son una crisis", dijo a la cadena NTV.
Isik afirmó también que "Turquía no tiene fuerzas para influir en este juego por sí sola, pero sí las tiene para defender sus intereses".
El 9 de mayo, el Pentágono informó que el presidente de EEUU, Donald Trump, aprobó un plan para armar a los grupos kurdos que combaten al grupo terrorista Daesh (autoproclamado Estado Islámico, proscrito en Rusia) en Siria, a pesar de las objeciones de Turquía.
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Las YPG kurdas han sido el aliado más fuerte de EEUU en su lucha contra Daesh en Siria, pero Turquía considera que el grupo es una extensión del Partido Kurdo de los Trabajadores (PKK), organización señalada como terrorista por Ankara.