"Eso demuestra lo sincera que es su postura respecto a la resolución de la crisis siria", afirmó Jaafari al intervenir en la televisión estatal del país.
Jaafari indicó que la delegación de Damasco no mantiene contacto con la de Ankara, pues no tiene confianza en Turquía y considera que sus acciones son causa de muchas crisis en la región.
Resaltó a la vez que varios Estados del mundo no están interesados en que se elimine el terrorismo en Siria, sino que aspiran a alcanzar sus "objetivos agresivos que contradicen los intereses fundamentales de los pueblos del Oriente Medio".
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El jefe de la delegación rusa, Alexandr Lavréntiev, dijo que la próxima ronda de estas consultas se llevará a cabo los días 3 y 4 de mayo precedida por una reunión de expertos en Teherán el 18 y el 19 de abril, en la que se planea consensuar varios documentos.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado en el que las tropas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas como Daesh (autodenominado Estado Islámico) y el Frente al Nusra, ambas prohibidas en Rusia y otros países.
Las hostilidades han causado, según estimaciones de la ONU, entre 300.000 y 400.000 muertos.
