Según comentó a Sputnik un oficial del Ejercito sirio, los explosivos se hallaron "en las entradas" de las viviendas y agregó que "quizás haya automóviles con cargas explosivas en las calles, igual que el año pasado".
Palmira, una de las joyas de la antigüedad, cayó en manos de Daesh (grupo terrorista autodenominado Estado Islámico, proscrito en Rusia) en mayo de 2015.
En marzo de 2016 las fuerzas armadas de Siria, con el apoyo de la aviación rusa, liberaron la ciudad, pero en diciembre Palmira volvió a caer en manos de los yihadistas, que destruyeron parte de sus monumentos.
El 2 de marzo de 2017 las tropas sirias, apoyadas desde el aire por las fuerzas rusas, recuperaron la ciudad.
La operación terminó con bajas mínimas por parte del Ejercito y sus aliados.