"El Gobierno sirio exigió a la ONU y al Consejo de Seguridad que condenen estos actos terroristas y redoblen el trabajo encaminado a aunar los esfuerzos de la comunidad internacional para acabar con el terrorismo y castigar a los países que prestan apoyo a este flagelo", dice el mensaje del Ministerio sirio de Exteriores enviado a ambas instancias y citado por la agencia.
Seis suicidas se hicieron explotar cerca del departamento del servicio de la inteligencia militar y cerca del departamento del servicio de seguridad del Estado en la provincia siria de Homs.
El gobernador de Homs, Talal al Barazi, confirmó que los atentados dejaron al menos 32 muertos y 24 heridos.
De acuerdo a las fuentes, en los ataques fallecieron al menos 35 personas, entre ellas el jefe del departamento de la seguridad militar para la provincia de Homs, Hasán Daabul.
Los atentados fueron reivindicados por el grupo terrorista Frente al Nusra (proscrito en varios países, Rusia incluida).
