"La liberación de Alepo abrirá el camino hacia la reanudación de un diálogo político sobre Siria", declaró Chizhov.
En un intento de solucionar la crisis siria, el 9 de septiembre Rusia y EEUU sellaron acuerdos que contemplaban una tregua, la creación del acceso humanitario a Alepo, la separación de la oposición siria de los terroristas, la coordinación de las operaciones entre los militares rusos y estadounidenses y la lucha contra los grupos terroristas.
Sin embargo, este plan no funcionó: las acusaciones mutuas de incumplir las condiciones de los acuerdos alcanzados, el bombardeo de EEUU a las tropas gubernamentales sirias, el ataque contra un convoy humanitario de la ONU y las numerosas infracciones del cese al fuego hicieron al Ejército sirio abandonar el plan y, más tarde, llevaron a la suspensión por EEUU del diálogo con Moscú acerca de un alto el fuego en Siria.
Más tarde se celebraron varias reuniones internacionales a alto nivel, incluido el encuentro en Lausana del 15 de octubre con la participación del enviado especial de Naciones Unidas para Siria, Staffan de Mistura, diplomáticos de EEUU y Rusia, los países que copresiden el Grupo Internacional de Apoyo a Siria y países regionales como Arabia Saudí y Turquía, pero terminaron sin resultados significativos.
La guerra en Siria ha provocado desde marzo de 2011 entre 300.000 y 400.000 muertos, según altos cargos de la ONU.