"La ciudad de Alepo ha sido blanco de una campaña aérea destructiva que empeoró el desastre humanitario", declaró el viceministro kuwaití de Asuntos Exteriores, Khaled Al Jarallah, citado por la agencia KUNA.
A la vez propuso que la Organización para la Cooperación Islámica también celebre una reunión al respecto a nivel de los delegados permanentes.
La situación en Alepo permanece tensa, el jueves pasado el secretario general adjunto de Asuntos Humanitarios de la ONU, Stephen O'Brien, constató que las condiciones en el este de la ciudad se aproximan a "abismo inmisericorde de una catástrofe humanitaria".
Además dijo que al menos 320 civiles, entre ellos 100 niños, murieron en la ciudad en una semana; otras 765 personas resultaron heridas.
Siria está sumida desde hace más de cinco años en una guerra civil en la que las tropas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y organizaciones terroristas como Daesh y Fatah al Sham, proscritas en Rusia y otros países.
El pasado 12 de septiembre, entró en vigor una nueva tregua en Siria, en virtud de un paquete de documentos acordado por Moscú y Washington para el arreglo de la crisis.
Una semana más tarde, el 19 de septiembre, el Ejército sirio abandonó el alto el fuego alegando numerosas infracciones por parte de los insurgentes, y dos días después de que la coalición liderada por EEUU bombardeara a las fuerzas gubernamentales sirias en Deir Ezzor, causando más de 80 militares muertos.
