De esta manera, los yihadistas se vieron obligados a retirarse de posiciones estratégicas.
Las fuerzas aéreas sirias hicieron retroceder al enemigo a una distancia que permite a la artillería pesada realizar ataques sobre las posiciones de los terroristas de Jaish Al-Fatah en la ciudad de Idlib.
Un comandante de campo en la provincia occidental de Latakia declaró a Sputnik que los terroristas habían sido desterrados de las posiciones ocupadas a través de ataques activos de la artillería pesada y ataques aéreos.
Según el comandante, el Ejército sirio logró destruir más de 4 vehículos, en los maleteros de los cuales habían sido instaladas ametralladoras de diferentes calibres. Además, todos los terroristas fueron liquidados, indicó.
"Trataron de romper la defensa de Kinsaba para abrir un nuevo frente en las afueras de la ciudad. Quieren aliviar la presión del Ejército sirio en las provincias de Latakia y Hama", concluyó.