"Las acciones de la Fuerza Aérea de Rusia permitieron dañar seriamente a los terroristas, sus infraestructuras, preservando el sistema estatal de Siria, lo que, en mi opinión, es el factor absolutamente clave", dijo Putin en el encuentro informal de los líderes de BRICS en la ciudad china de Hangzhou al margen de la cumbre del G20.
Rusia lanzó una operación aérea en Siria el 30 de septiembre de 2015 a petición del presidente sirio, Bashar Asad. La ofensiva duró cinco meses y medio y tuvo como objetivo atacar las posiciones de los grupos terroristas.
Tras acordar con EEUU un armisticio en Siria, Rusia retiró de este país el grueso de sus fuerzas; sin embargo, la presencia militar rusa se mantiene en el puerto sirio de Tartus y en la base aérea Hmeymim.