MOSCÚ (Sputnik) — "El mismo día que los presidentes de Rusia y Estados Unidos aprobaron la iniciativa conjunta de poner fin a las acciones de combate en Siria, empezaron a escucharse voces, desde países aliados de EEUU y desde el propio Washington, que comenzaron a poner en tela de juicio la viabilidad de ese acuerdo", dijo en una reunión con el exsenador estadounidense Sam Nunn, copresidente y director ejecutivo de la Iniciativa contra la Amenaza Nuclear.
En este tipo de declaraciones se perciben "llamamientos a la guerra", advirtió el jefe de la diplomacia rusa.
Entretanto, la cooperación entre Rusia y EEUU "beneficia la estabilidad estratégica en el mundo", resaltó Lavrov.
Sam Nunn manifestó a su vez que la implementación del acuerdo sobre Siria "requerirá de buena fe", y agradeció la voluntad política de Rusia.
EEUU y Rusia publicaron el lunes una declaración conjunta que establece un alto el fuego en Siria a partir del próximo 27 de febrero.
La medida no se aplicará a grupos declarados terroristas por la ONU como Daesh (Estado Islámico) o Frente al Nusra, prohibidos en muchos países incluida Rusia.
