"El 4 de febrero, unos miembros del separatista y terrorista PKK abrieron fuego contra los agentes del orden público, a raíz de lo cual un policía murió y también fueron abatidos 9 extremistas; al abandonar el edificio, los terroristas le prendieron fuego", dice una declaración emitida en la web del gobernador de la provincia de Sirnak.
También se señala que el 5 de febrero fue atacada con lanzagranadas la sede del servicio de seguridad local y que 4 atacantes fueron abatidos con el fuego abierto en respuesta.
Anteriormente, la oficina de prensa del pro-kurdo Partido Democrático de los Pueblos comunicó a RIA Novosti que 9 civiles de la ciudad de Cizre de la provincia de Sirnak murieron y otros 25 recibieron quemaduras o resultaron heridos por el fuego abierto desde morteros contra un edificio, donde después se declaró un incendio.
En diciembre de 2015, Ankara declaró el toque de queda en varias localidades de mayoría kurda en el sureste del país, en particular, en Cizre y Silopi de la provincia de Sirnak, en el distrito histórico de Sur de la ciudad de Diyarbakir, y también en la ciudad de Nísibis de la provincia de Mardin.
En Sur y Cizre continúan enfrentamientos callejeros entre las fuerzas del orden y los extremistas del PKK.
Según el Estado Mayor General de las FFAA de Turquía, más de 750 extremistas kurdos fueron eliminados desde mediados de diciembre en los distritos donde se lleva a cabo la operación antiterrorista.