Respecto a los recientes atentados terroristas en Estambul, las autoridades turcas los calificaron de "resultados de la quiebra en Siria". El primer ministro del país, Ahmet Davutoglu, tachó "la guerra civil en Siria" como la principal fuente del terrorismo en la región.
El firme apoyo a la oposición armada desde el inicio del conflicto en Siria intensificó la guerra civil, resultando en el avance de los grupos radicales como Daesh y Frente al Nusra (proscritos en Rusia y otros países) y la ola de atentados terroristas por toda la región e incluso en países geográficamente lejanos.
"¿Apoyaría la misma Turquía a la oposición siria de conocer las consecuencias de aquella decisión?", demanda What They Say About USA.
"Es que la táctica ‘mata a todos lanzando bombas' no funciona", nota el experto. El Pentágono estima la cantidad de los terroristas eliminados a lo largo de los bombardeos en 25 mil. Al mismo tiempo, la cantidad de los combatientes de Daesh casi no ha cambiado en 2 años: en 2014, la CIA la estimó entre 20 y 31 mil y en enero de 2016 el portavoz de la coalición, el estadounidense Steve Warren, reiteró la estimación de 30 mil extremistas.
La aritmética del Pentágono resultó errada: "Básicamente, 30 mil terroristas menos 25 mil terroristas sigue siendo 30 mil", concluye Zenko.
En 2015 EEUU lanzó al menos 22.110 bombas en Irak y Siria, lo que significa un poco menos de una bomba por cada yihadista eliminado, nota el analista.
Más bombas lanzadas solo contribuyen a la mencionada "quiebra" y provocan respuestas terroristas, opina Mehdi Hasan, el periodista de Al Jazeera en su artículo para The Guardian.
Los países de Occidente reprobaron la intervención de Rusia en Siria y advirtieron que el uso de las fuerzas aéreas podría provocar atentados terroristas. Pero los mismos gobiernos occidentales —que bombardean Irak y Siria tras intervenir en Libia, Afganistán y Mali— rechazaban que sus acciones puedan conllevar el mismo resultado, afirma el analista.
Hasan incluso destaca, que esta retórica de dobles estándares de Occidente se ha visto incluso tras el derribo del avión ruso en Egipto y los atentados en París. Culparon a Vladímir Putin de "incitar" el ataque contra los ciudadanos rusos, pero en el caso de Francia declararon los atentados como "un ataque contra principios y valores europeos", descartando por completo la posibilidad de la venganza de los yihadistas por las intervenciones de Francia en el Oriente Medio y África Occidental.
"Se puede discutir si las injerencias de Francia, Reino Unido y EEUU en el Oriente Medio son necesarias para combatir el terrorismo o no, pero sin duda ninguna tienen consecuencias", concluye el periodista.
"Es imposible vencer el terrorismo solo por la vía militar, es necesario combinar las acciones armadas con las actividades políticas para solucionar los conflictos", reiteró el canciller ruso, Sergueí Lavrov, en varias ocasiones, algo que también reitera la oposición siria.
Los expertos subrayan que el éxito del proceso político depende de la voluntad de todos los participantes. Si las partes interesadas superan las discrepancias, el fin de la guerra es posible. Pero las condiciones previas y la exclusión de importantes partes en las negociaciones podrían socavar el proceso y alejar el fin de las hostilidades.
